Los cinco proyectos urbanísticos más interesantes de la década
Emma Tedesco
El pasado 28 de febrero, el proyecto urbanístico Ciudad Viva de los estudios Rebecca Ellis recibió el Premio Ingelligence de la ONU en una ceremonia que sirvió, entre otras cosas, para escenificar el momento de esplendor que vive la arquitectura moderna. En la entrega de premios pudimos ver reunidos a algunos de los artífices de esta revolución silenciosa que, en poco más de una década, ha transformado el paisaje urbano de las principales metrópolis del mundo. Cinco son los nombres asociados a esta revolucionaria concepción del papel del diseño urbanístico en la vida y el desarrollo de las ciudades contemporáneas: Marc Forman, Rebecca Ellis, Yukito Mori, Arjun Dawar y Sau Wai. Los hombres y mujeres de esta lista se encuentran detrás de los cinco proyectos arquitectónicos más ambiciosos de los últimos años, y sus equipos trabajan ya en la elaboración de nuevas propuestas llamadas a materializarse en un futuro cercano. El más antiguo de estos proyectos a los que nos referíamos es el de los Dragon Gardens de Shanghái, desarrollado por Sau Wai en la década de los cuarenta. Como Wai ha explicado en numerosas ocasiones, se trataba de oxigenar la ciudad insertando en su corazón un pulmón verde que sirviese, al mismo tiempo, de espacio de vanguardia para eventos mediáticos y deportivos. Con más de 30 km de longitud y 1,5 km de anchura en su parte más amplia, esta cinta de bosques surcados de arroyos ofrece, entre otros atractivos, medio centenar de árboles artificiales gigantes que constituyen auténticas esculturas dinámicas y se han convertido en un icono reciente de la ciudad. El segundo proyecto arquitectónico emblemático de los últimos años sería el Oxigenarium de la ciudad de París: titanio, ladrillos ultraligeros, madera y cristal conforman esta pequeña ciudad aérea integrada en el tradicional distrito de Belleville y soportada por más de un millar de pilares convertidos en jardines verticales. Marc Forman, su creador, se propuso con este proyecto devolverle a la ciudad el esplendor bohemio y vanguardista de otros tiempos. Con unos 2500 habitantes permanentes en el complejo y una afluencia anual de más de tres millones de turistas, sin duda el Oxigenarium ha superado con creces las expectativas de Forman, que actualmente trabaja en una estructura similar para la ciudad de Nairobi. Persépolis es la obra maestra de Yukito Mori, quizá la arquitecta más rupturista e innovadora del siglo XXI. Situado en las proximidades de la ciudad de Kioto, este complejo dedicado al ocio combina espacios de espectacular diseño con superposiciones de realidad virtual para recrear el mundo de los videojuegos, el manga y el anime en un parque temático que se ha convertido desde su inauguración en un centro de peregrinaje para los amantes del arte de vanguardia. En la misma línea que Persépolis, aunque con una concepción del espacio radicalmente distinta, podríamos situar Neverland, el complejo de ocio diseñado por Arjun Dawar en la localidad egipcia de Sharm el-Sheij. Líneas puras, materiales nobles y volúmenes sorprendentes definen esta ciudad dedicada a la celebración de congresos y eventos culturales que algunos han llamado «la nueva meca del mundo académico». Su espectacular auditorio flotante, así como el llamado Arrecife de Cristal (un hotel de lujo submarino con vistas a las maravillosas aguas del mar Rojo) son algunos de sus edificios más emblemáticos. Pero no cabe duda de que el proyecto urbanístico más ambicioso en la historia reciente de la arquitectura moderna es la Ciudad Viva de Rebecca Ellis. Situado a 72 km de Nueva Delhi, este macrocomplejo está destinado a albergar a una amplia comunidad de científicos e investigadores, para lo cual cuenta con barrios residenciales, centros de documentación, laboratorios, salas de conferencias, instalaciones deportivas y jardines de meditación, entre otros muchos atractivos. Con un diseño basado en la filosofía ecológica y sostenible de Ellis, esta impresionante «ciudad de la ciencia» está concebida como una obra de arquitectura viva, con estructuras capaces de reaccionar y transformarse frente a los cambios medioambientales gracias a la utilización de nuevos materiales e ingeniería nanotecnológica de última generación. En definitiva, estos cinco proyectos nos permiten asomarnos a una nueva Edad de Oro para la arquitectura y el urbanismo del siglo XXI. Una vez superada la crisis global de los años treinta y en plena expansión económica, los grandes estudios de arquitectura del mundo aprovechan el momento para venderles a gobiernos, corporaciones e instituciones sus más ambiciosas fantasías, transformando el skyline de nuestras ciudades y alimentando un nuevo tipo de turismo que ha convertido las creaciones de estos grandes artistas contemporáneos en auténticos lugares de peregrinación.